Editorial Blog Evidencia de Dios.
Fe y la Razón no se oponen, se complementan:
Una Mirada a los fines del Blog «Evidencia de Dios»
Cuando entras a nuestro Blog te reciben enseguida las siguientes frases en su parte inicial: primero, “Fe y Razón: Explorando la Lógica detrás de la Creencia” y seguidamente “¿Existe la posibilidad que los avances científicos que explican los misterios del universo y de nuestro mundo no estén en conflicto con la idea de un Creador, sino que la complementan y sustentan?”, pero, ¿Qué significan realmente»? Más allá de un simple título y subtitulo, estas frases contienen la esencia de nuestra misión: crear un espacio donde la fe y la razón convergen, invitando a los lectores a explorar el misterio de la existencia de Dios de una manera profunda y reflexiva.
Fe: Más Allá de la Razón
La tradición católica y sus dogmas nos enseña que la fe es mucho más que una creencia en lo intangible, en Dios que no vemos. Nos dice que es un camino de encuentro personal con Dios, que no se agota en el ámbito de lo intelectual, sino que involucra una entrega profunda del corazón y la voluntad. La fe nos impulsa a trascender lo material y nos abre a una realidad más allá de lo que podemos ver y tocar. Como dijo San Agustín, «la fe es creer lo que no vemos, y la recompensa de la fe es ver lo que creemos».
Lo anterior no significa que la fe sea un salto ciego en la oscuridad. La fe y la razón no son opuestas, sino complementarias. De hecho, la teología católica ha sostenido y recientemente en la encíclica fe y razón de Juan Pablo Segundo, que la razón puede ayudarnos a comprender y profundizar en los misterios de la fe. También nos recuerda que el deseo de las personas de conocer la verdad está tallado en nuestro ADN como si fuera en una piedra. Jamás renunciaremos a cuestionarnos con argumentos lógicos sobre las preguntas que nos vienen sobre este tema.
Ahora, ¿Te has preguntado alguna vez cómo la razón y la fe pueden trabajar juntas para revelar verdades más grandes?
La Razón: Un Aliado en la Búsqueda de la Verdad
Aunque la fe es el camino hacia lo trascendente, la razón juega un papel crucial en nuestra búsqueda de Dios. A través de la historia el hombre ha querido profundizar en estos temas; grandes científicos, filósofos, y personajes laicos y comprometidos con la fe han abordado con profundidad esta reflexión trascendental, entre algunos pocos ejemplos: Aristoteles, con su concepto del “Primer Motor Inmóvil”; Santo Tomás de Aquino, combinó la filosofía aristotélica con los principios cristianos; René Descartes, con el uso de su duda metódica llegó al convencimiento de la existencia de Dios; Immanuel Kant, critico de los argumentos tradicionales sobre la existencia de Dios y lo justifica como una necesidad moral; Gottfried Wilhelm Leibniz, fundamenta su argumento en la existencia de Dios en el hecho que todo debe tener una razón suficiente; William Paley, formuló el argumento de la complejidad y exactitud del universo comparado con un reloj, y dijo que necesariamente debía existir un diseñador de todo ello; Max Plank, considerado el padre de la física cuántica, en las dos ocasiones en que recibió el premio nobel por el estudio de la materia (1918 y 1936) se refirió a Dios como la causa de lo existente; etc.
En este Blog todo lo anterior lo tratamos desde una óptica comprensible, explicado de manera simple.
Evidencias Históricas, Racionales y Científicas: El Rastro de Dios en el Tiempo
Entonces, dicho lo anterior, a lo largo de la historia de la humanidad, esta ha acumulado una cantidad considerable de argumentos de distintas naturaleza para explicar o intentar explicar, de acuerdo a la posición que se tome, la posibilidad de un Ser Supremo. Ahora, los registros históricos descritos en la Biblia y otros documentos, como los de Jesús de Nazaret, su vida y resurrección, son examinados no solo por creyentes, sino también por historiadores seculares, algunos de los cuales consideran estas pruebas dignas de consideración, o por lo menos de análisis bajo una propuesta justa de debatirse.
Incluso en el ámbito científico, encontramos fenómenos que nos hacen cuestionar lo que sabemos. El Big Bang, por ejemplo, indica que el universo tuvo un principio definido. ¿Qué lo causó? La ciencia puede explicar el «cómo» de este evento, pero queda abierta la pregunta del «por qué». ¿Es posible que este momento de creación sea una señal de una mente creativa detrás del cosmos? Son muchas las teorías científicas que argumentan la existencia de una entidad superior detrás de lo creado. Algunas con mayor precisión y fortaleza.
La propuesta de Francis Collins, director del Proyecto Genoma Humano durante 9 años y autor del libro ¿Cómo habla Dios? La evidencia científica de la fe y creador, es una muestra de cómo desde argumentos consistentes científicos, se puede abordar el tema de la existencia de Dios.
Objeciones y propuestas contrarias: ¿Qué dicen quienes no aceptan estos argumentos, los de la existencia de Dios?
Como en todo, y bien venidos, existen objeciones a la existencia de Dios, y nuestro blog invita a examinar críticamente estas posturas. Muchos son los argumentos para refutar la existencia de Dios, entre otros, que el mal en el mundo es incompatible con un Dios benevolente. Existen muchos otros argumentos en este sentido, pero ninguna de estas objeciones ha refutado de manera concluyente la realidad de Dios. De hecho, muchas veces estas cuestiones nos invitan a profundizar más en nuestra comprensión del misterio divino.
Ahora, la ausencia de una negación absoluta y concluyente no significa que no debamos seguir cuestionando, pero nos deja necesariamente un interrogante: si la existencia de Dios no ha sido refutada, ¿no merece entonces una mayor consideración?; si existen tantos argumentos de su existencia, ¿no merece una mayor contemplación?
Un Viaje Absolutamente Personal hacia la aceptación de la existencia de Dios.
Nuestro blog tiene la misión de explorar y no de imponer una creencia. Queremos que nuestros lectores se sientan partícipes de un proceso de descubrimiento personal, en lugar de ser persuadidos directamente. Que cada quien, con su lógica, internamente y libremente, estén atentos a considerar las evidencias de la existencia de un ser superior, tanto creyentes como escépticos, cuestionando nuestras propias creencias y, quizás, encontrar en este viaje más razones para creer de las que inicialmente habían previsto. O lo contrario si fuese el caso.
¿Si estás dispuesto a dar el siguiente paso en esta búsqueda? ¿Qué preguntas te has hecho sobre la existencia de Dios? Te invitamos a compartir tus reflexiones en los comentarios y a continuar esta conversación con nosotros. Después de todo, este camino no es solo de fe, sino también de razón, historia y descubrimiento.